La palabra “Corteo” refiere a una procesión alegre, la nuestra es una suerte de desfile festivo que nace de la fantasía de un clown. Uniendo la pasión del actor con la elegancia y la fuerza del acróbata, el espectáculo nos transporta a un mundo teatral hecho de diversión, comedia y espontaneidad, un espacio misterioso suspendido entre el cielo y la tierra. El clown imagina su proprio funeral, envuelto en una atmósfera carnavalesca, mientras los ángeles desde arriba observan benévolos y atentos. Lo alto se mezcla con lo bajo, el ridículo con lo trágico y la magia de la perfección con la fascinación de la imperfección, devolviéndonos la fuerza y la fragilidad del clown, su sabiduría y su tierna inocencia, esos rasgos de humanidad que están dentro de cada uno de nosotros. La música, a veces lírica, a veces divertida, evoca un rito sin tiempo en el cual la ilusión juega con la realidad.

La palabra “Corteo” refiere a una procesión alegre, la nuestra es una suerte de desfile festivo que nace de la fantasía de un clown. Uniendo la pasión del actor con la elegancia y la fuerza del acróbata, el espectáculo nos transporta a un mundo teatral hecho de diversión, comedia y espontaneidad, un espacio misterioso suspendido entre el cielo y la tierra. El clown imagina su proprio funeral, envuelto en una atmósfera carnavalesca, mientras los ángeles desde arriba observan benévolos y atentos. Lo alto se mezcla con lo bajo, el ridículo con lo trágico y la magia de la perfección con la fascinación de la imperfección, devolviéndonos la fuerza y la fragilidad del clown, su sabiduría y su tierna inocencia, esos rasgos de humanidad que están dentro de cada uno de nosotros. La música, a veces lírica, a veces divertida, evoca un rito sin tiempo en el cual la ilusión juega con la realidad.

Un sueño de México de ojos abiertos Luzia te transporta a un México imaginario, como en un sueño de ojos abiertos, donde la luz sacia el espíritu y la lluvia  alivia al alma. A través de una serie de grandiosas sorpresas visuales y ejecuciones acrobáticas impactantes, Luzia invita a los espectadores a un viaje surreal, en un mundo suntuoso y vivaz, suspendido de alguna manera entre el sueño y la realidad.Pasando con agilidad de un set de filmación de una película de época en el océano, a las atmósferas brumosas de una pista de baile o a un árido desierto, Luzia trae hábilmente a escena los innumerables lugares,  caras  y sonidos de México, tanto de la tradición como de la modernidad. Rico en momentos sugerentes, Luzia encanta al público integrando el elemento de la lluvia en algunas escenas artísticas y acrobáticas, la primera vez en una producción en gira del Cirque du Soleil.  

La palabra “Corteo” refiere a una procesión alegre, la nuestra es una suerte de desfile festivo que nace de la fantasía de un clown. Uniendo la pasión del actor con la elegancia y la fuerza del acróbata, el espectáculo nos transporta a un mundo teatral hecho de diversión, comedia y espontaneidad, un espacio misterioso suspendido entre el cielo y la tierra. El clown imagina su proprio funeral, envuelto en una atmósfera carnavalesca, mientras los ángeles desde arriba observan benévolos y atentos. Lo alto se mezcla con lo bajo, el ridículo con lo trágico y la magia de la perfección con la fascinación de la imperfección, devolviéndonos la fuerza y la fragilidad del clown, su sabiduría y su tierna inocencia, esos rasgos de humanidad que están dentro de cada uno de nosotros. La música, a veces lírica, a veces divertida, evoca un rito sin tiempo en el cual la ilusión juega con la realidad.

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